sábado, 23 de julio de 2011

Bitácora de New York (Segunda parte y final)


Nos regresamos por Tower Parkway y vimos de lejos el Becton Enginnering and Applied Science Center (1968) de Marcel Brewer (típico estilo Brewer). Doblamos por Hight Street y nos encontramos el Beinecke Rare Book and Manuscript Library (1961) de Gordon Bunshaft, Skidmore, Owings and Merril. Una caja de piedra transparente soportada por pilares metálicos triangulares. Atravesamos el Campus antiguo, muy estilo campus universitario de EUA. Seguimos caminando hasta llegar de nuevo al The Yale Center for British Art. El edificio no promete mucho por fuera pero es increíble por dentro. El manejo del concreto combinado con la madera en paneles, todo bañado por la luz interior cenital, da la impresión de tranquilidad y elegancia. Dentro está conformado por dos patios uno de los cuales está invadido por una escalera cilíndrica de planta cuadrada, dentro de un espacio de proporciones majestuosas. La exposición de pintura y manuscritos británicos del Neoclásico no tiene madre. (vimos uno de los originales de Mary Shelley del Frankenstein, El Moderno Prometeo, y me gusto en particular el cuadro del Diluvio Universal. Salimos de la galería y fuimos a un Café-librería en la parte baja del edificio. Después nos fuimos caminando hasta la tienda de recuerdos de Yale y compramos camisetas. Salimos y nos fuimos a pie a la estación pasando por el Temple Street Parking Garage de Paul Rudoph (1962) el cual recuerdo haber visto en un libro de perspectiva de Jacoby. El estacionamiento es de concreto y este material se ve viejo. El edificio ha envejecido. Llegamos a la estación y abordamos el tren. Unas estaciones más adelante se sentó conmigo una muchacha de New York (Shelley) y practique mi Ingles hasta que llegamos a Grand Central en NY. La muchacha era Judía de 43 años, actriz de teatro y empleada de oficina. Salimos de la estación y nos fuimos caminando hasta Lindy's a cenar. De ahí nos fuimos al Flash Dance, un table dance en Broadway hasta las 4:00 A.M. y nos regresamos al hotel.

Sábado 18: salimos del hotel y fuimos a pie a desayunar al Bistro con las francesas. Salimos y tomamos el Metro a Brooklyn, y por ir platicando y discutiendo acerca del De-constructivismo, nos pasamos dos estaciones, llegando hasta Parkside Ave. Nos regresamos y salimos en Eastern Parkway y nos fuimos caminando por una gran avenida, de grandes proporciones con un Arco del Triunfo y un gran acceso al Jardín Botánico. Fuimos caminando por la lateral de la Biblioteca Pública hasta llegar al The Brooklyn Museum. Un edificio de estilo Neoclásico, de muy buenas proporciones. Adentro nos esperaba una magnífica colección de esculturas de Rodin y cuadros de Impresionistas a Neo-impresionistas (grabados) alemanes. Entre los que destacan la obra de Kirchner, vimos colecciones de muebles…….un cuadro de Hooper y cuadros de Sargent.

Lamentablemente ahí termina el relato al detalle. Lo que sigue es una especie de borrador en una hoja de papel del hotel The New York Palace que tal vez me sirvió para desarrollar y ordenar mis recuerdos.

Sábado 18: Metro a Brooklyn, nos pasamos dos estaciones. Llegamos a pie al museo a través de Botanic Park. Expo esculturas de Rodin + Impresionistas, salimos a las 5 P.M. regreso en Metro al hotel. Cena. Restaurant al lado del hotel sopa de almeja + sándwich de langosta.

Domingo 19: Misa San Patricio. Desayuno en Lindy's. Lincoln Center a pie compra boletos Opera – Metropolitan Opera House. Caminando Museo Historia Natural. Atravesamos Central Park. Museo Metropolitano. Obras Sargent, Wright (sala) Palacio Mastaba (egipcio) Van Gogh, Seurat, Degas ¡! Tolouse Lautrec, Gaugin (librería del Museo) regresamos caminando por la Quinta. Paso por Fao Schwartz (toys). Cena china en la séptima camino Broadway hasta teatros. Arroz con puerco, spaguetti, brócoli con carne.

Lunes 20: desayuno bistro Lexinton (tachado) fuimos al Pier 17, Wall Sreet, Bolsa de Valores, World Financial Center (Pelli) World Trade Center, Yamasaki, tienda computadoras, tienda música, Pearl en Barrio Chino. Metro hacia el hotel. Cena en restaurante japonés (Soba + Futomaki con Tempura). Opera El Barbero de Sevilla, regreso en taxi.

Martes 21: desayuno en Lexinton (bistro). Chrysler Building, Ford Fundation, tienda del Ejército de Salvación. Caminando al Guggenheim de Soho. Tienda de fotografía, galerías, compra tasas. Tienda de Boy George (Boy London), William Sonoma. Restaurant Manhattan Bistro, cervezas + botana. Restaurant Eat and Drink cena + cervezas hasta 12 P.M. (minimalista). Regreso en Metro.

Miercoles 22: desayuno bistro. Museo Whitney (Marcel Brewer). Arte moderno "Beat", películas Robert Frank. Tienda del museo. Café – pays. Comimos hot dogs en la calle (3 cada uno). 5ª. Ave. Llena. Tienda WB. Tienda discos Broadway. Cena restaurante griego, lentejas + hamburguesa.

Jueves: Desayuno Lindy's. Desfile de Acción de Gracias. Frio 2 grados C. recorriendo calles, Trump Tower.

Imagen: La Estatua de la Libertad desde Battery Park.


Bitácora de New York (Primera parte)


En Noviembre de 1995, el Arquitecto Fausto Rodríguez y un servidor fuimos a Nueva York en un viaje "de estudios" invitados por el Arq. Eduardo Chávez Perches, amigo muy querido desde hace muchos años. Cuando empecé a escribir este blog, una de mis dudas fue si realmente un "Blog" es una bitácora y si debía escribir acerca de mis experiencias "día a día". En fin, hace poco, revisando mis papeles me encontré una libreta donde escribí en breves palabras, mis experiencias de esos días en la "Gran Manzana". He aquí lo que encontré:

25 de Noviembre de 1995; de regreso de mi viaje a New York:

Jueves 16: Salimos de México, D.F. por Delta a las 10:00 A.M. hacia NY. Llegamos a las 4:30 P.M. hora local. Tomamos un taxi hacia el hotel (New York Palace) en la Ave. Madison, atrás de San Patricio. Llegamos y nos registramos. Subimos a la habitación y nos encontramos con la vista (piso 34) de la parte posterior de San Patricio, y el Rockefeller Center en todo su esplendor. Bajamos y nos encontramos con un cocktail en el patio exterior del hotel (esculturas de hielo de edificios de Nueva York, dos músicos con trompetas entonaban villancicos) pedimos unos whiskys y fumamos cigarros platicando. (temperatura cercana a 0 grados). Salimos del hotel y tomamos el Metro hasta Greenwich Village hasta el restaurant "Sweet Basil" (Jazz). Cenamos Pasta, tomamos whisky y escuchamos una magnífica interpretación de Jazz del grupo de Bruce Onsby (piano, Bajo, batería y sax). Salimos a las 11 P.M. regresamos en Metro hasta cerca del hotel y nos fuimos a acostar. (ántes del restaurant fuimos a la estación Grand Central de trenes en Park Avenue a pedir itinerarios para New Haven)

Viernes 17: nos levantamos temprano y fuimos caminando por Park Avenue hasta Grand Central. Compramos boletos a New Haven. Subimos al tren Metro North Railroad que salió a las 10:07 A.M. en el trayecto pasó por Harlem donde vimos la parte obscura de New York. Edificios tapiados, cercas y descuido y salimos de la ciudad. Atravesamos bosques en Otoño y pueblos. El tren hizo paradas en andenes muy pintorescos con gente que vive en los suburbios. Llegamos a New Haven a las 11:50 A.M. bajamos al andén (antes de llegar vimos a lo lejos la torre del Knights of Columbus Headquarters, contruida en 1967 por Kevin Roche, John Dinkeloo & Associates) y salimos de la estación. Fuimos caminando y pasamos por el New Haven Veterans Memorial Coliseum de Roche de 1969. Pasamos por el barrio latino y hasta el momento la ciudad se veía desolada y fría. Llegamos a una cafetería al parecer de una familia griega y desayunamos. (la cafetería parecía estar llena de estudiantes y maestros) salimos y nos encontramos calles adelante con el Yale Center for British Art de Louis Kahn de 1973 la cual fotografiamos por fuera. Enfrente nos encontramos con la Yale University Art Gallery del mismo Kahn de 1953. El primer edificio fue su ultima obra y el segundo su primer museo. Entramos y había exposiciones de arte D'stijil, Kandinsky, Klee, Post Impresionistas, hasta Hooper (una revelación) Braque, Mondrian. Vimos una magnifica escalera cilíndrica con desarrollo triangular que remataba en tapa con corona de Vitroblock. Salimos y cruzamos la calle (York Street) en la esquina estaba la Art and Architecture Building de Paul Rudolph de 1962-63. Una magnifica volumetría exterior…..pero…….pedimos permiso para pasar y el interior fue……opresivo y obscuro. Accedimos por escalera y pasillos estrechos sin iluminación exterior (un verdadero interior Medieval). Llegamos a un gran salón, al parecer de exposiciones de trabajos donde había algunas maquetas. En los muros fotos de trabajos de alumnos graduados mas distinguidos (Foster, Rogers, Charles Moore, etc……muy distinguidos. Subimos a los talleres y oficinas….la sensación de encierro perduró. Salimos y fuimos por York Street hacia Broadway a los dormitorios Samuel Morse and Ezra Stiles Residential Colleges (1960) de Eero Sarinen y al Yale Co-op (1961) del mismo arquitecto. Con un estilo extraño que recuerda Nuevo México o arquitectura del desierto.

Hasta aquí la escritura. Luego aparecerá la segunda parte.

Imagen: Vista nocturna del Empire State.

jueves, 20 de enero de 2011

Imagina!










En un universo ideal, cabe la posibilidad de crear una realidad de acuerdo a lo que debería ser mejor para todos. Si solo tomáramos un momento para reflexionar sobre qué acciones son mejores en beneficio del bien común, viviríamos en una ciudad de la cual estaríamos orgullosos.




Si solo tuviéramos la oportunidad de moldear el espacio urbano siguiendo criterios estéticos, técnicos, sostenibles y sociales y dejáramos la política y la simulación a un lado.




Imagina edificios y espacios públicos realmente construidos para la gente. Imagina poder sentirnos parte de esto y legarlo a las generaciones futuras.




En un universo paralelo, nuestra ciudad sería espectacular.




Imagina!




“Realidad Difusa”



Tratando de descifrar la realidad tan extraña en la que vivimos. Me refiero a lo que estamos experimentando en la metrópoli de La Laguna, otrora pacifica y orgullosa región con muchas carencias pero con buena calidad de vida. Viene a mi mente el inicio del ensayo de Guy Debord "La Sociedad del Espectáculo" que remite al pensamiento de Ludwig Feuerbach, filosofo alemán del siglo XIX considerado el padre del Humanismo Ateo.


"Y sin duda nuestro tiempo... prefiere la imagen a la cosa, la copia al original,


la representación a la realidad, la apariencia al ser..."


Nos acostumbramos a percibir la realidad a través de numerosos filtros de entre los cuales destacan los medios de comunicación y estos nos presentan una metrópoli en tonos grises con escaso desarrollo económico, pocos logros en comparación con otras ciudades de dimensión equivalente, autoridades dando tumbos y traspiés, y una violencia generalizada originada en la delincuencia que, de tanta saturación, ya empezamos a ver como natural e inevitable.


Otro filtro es el de los rumores que corren de boca en boca y cuyo tema central y casi exclusivo es la presencia del crimen organizado y la impunidad en todos los aspectos de nuestra existencia. Temas como el desempleo, la escasa inversión, el nulo desarrollo económico, la extinción paulatina de todo tipo de actividad recreativa y cultural, están presentes en nuestras conversaciones.


Empezamos a percibirnos como una sociedad sin esperanza y esta idea es particularmente intensa entre nuestra juventud.


Si reflexionamos a través de estas palabras acerca de la realidad actual de nuestra ciudad y tratamos de desenmascarar la percepción que tenemos, positiva o negativa, del estado que guarda la vida urbana nos encontramos con una verdad, desde mi punto de vista, desgarradora.


Nuestras ciudades se encuentran en un proceso de franco desmantelamiento de sus estructuras e instituciones y peor aún, de sus tradiciones y valores. Cuando empezó este proceso destructivo? No lo sé. Si me aventurara a especular sobre algún acontecimiento o evento detonador diría que más o menos coincide con el inicio de la alternancia política en las administraciones municipales en Torreón. Esta fue la causa? Probablemente no. Lo que si está claro es que a partir de lo anterior, se empezó a destruir cada vez que cambiaba la alcaldía a otro partido. Venia un proceso de desaparición de los logros, avances y sistemas implantados por la administración anterior hasta llegar al colmo de la situación actual donde se llego al absurdo del desmantelamiento físico de las oficinas municipales y el despido masivo del personal operativo.


Que impacto ha tenido esto en la ciudad? Poco a poco se ha perdido la manera correcta de hacer las cosas. Los procedimientos y estándares de calidad, si alguna vez los hubo aunque de manera muy rudimentaria se han eliminado para dar paso a la más descarada improvisación. Desde las "grandes obras" hasta las más pequeñas impera una desorganización y una mediocridad en la ejecución que raya en lo grotesco. Esto en parte promovido por un estado total de impunidad que permite hacer y deshacer sin responsabilidad y sin temor a las consecuencias.


En el periodo de alternancia al que me refiero, los nuevos alcaldes llegan con la idea fija de trascender mediante la ejecución de grandes obras (¿) que opaquen los logros de la administración anterior y si es de signo contrario, mejor. No interesa si lo que se propone es de real beneficio para la ciudad. No importa si tratando de solucionar algún "problema" o "demanda" añeja, agravan la situación. Bajo esta tónica hemos padecido "distribuidores viales colapsados", "modernizaciones" del Boulevard Independencia y Diagonal Reforma, "Reubicación" de Ambulantes, una Presidencia Municipal dividida y ahora para colmo, el adefesio llamado "Gran Plaza". De la misma forma por desidia y total falta de control, perdimos el Museo "Casa del Cerro" y el patrimonio industrial de la "Jabonera la Unión".


Nuestra realidad es la de un pueblo fantasma donde paulatinamente sus habitantes han huido y los pocos que quedan viven en la total incertidumbre. Ya no hay inversiones y la actividad económica se ralentiza cada vez más. La delincuencia se ha adueñado de grandes zonas de la ciudad, incluso el centro histórico. Y por doquier se observa el deterioro y la rapiña.


Me atrevo a afirmar que en los últimos diez años no solo no ha habido desarrollo sino que por el contrario hemos tenido un progreso inverso, perdiendo mucho de los que se había construido como ciudad. Hemos perdido en calidad de vida, seguridad, convivencia, ingreso, respeto, civilidad, cultura y un sinfín de aspectos. Nos hemos quedado con una fea sensación en la boca del estomago muy parecida a cuando presenciamos impotentes una catástrofe.


Y lo peor es que la mayor parte es culpa de nosotros mismos y de los que hemos escogido para gobernarnos. Nosotros por omisión y ellos por acción. Para el caso es igual. Todos tenemos responsabilidad en este desastre en el que se ha convertido nuestra existencia como comunidad.


Si no le ponemos remedio a esto con acciones individuales que vayan sumando en lo colectivo, esta situación se va a deteriorar a niveles insostenibles. Acciones que aunque pequeñas trasciendan en una mejora en la calidad de vida.


En nuestras manos está la solución.

Imagen: Amanecer en Manhattan, New York.